Cuánto viven los saltamontes
Los saltamontes o langostas viven más de 7 semanas por lo general. Son insectos voladores, de alimentación herbívora, con 2 patas traseras muy fuertes que les permite desplazarse en el entorno natural. Bastante desconocidos para muchas personas, son distintos los factores que condicionan la vida útil de los saltamontes. En las siguientes líneas te los explicamos todos ellos para que los conozcas perfectamente.
¿CUÁNTO TIEMPO VIVEN LOS SALTAMONTES?
Como te hemos mencionado anteriormente, la esperanza de vida de los saltamontes varía en función de una serie de factores. Entre los más representativos están los siguientes:
- La temperatura del lugar donde habitan.
- La alimentación que tengan y la frecuencia con la que se alimentan estos insectos.
- La existencia de un mayor o menor número de depredadores naturales en el entorno. Algunos de los depredadores más comunes de estos insectos son: las abejas, avispas, monos, roedores y algunas aves.
- La existencia de algunos tipos de parásitos o incluso enfermedades que limitan su longevidad.
Aunque pueden existir otros factores, además de los mencionados en las líneas anteriores, éstos son los más frecuentes a la hora de determinar cuántos años viven los saltamontes. Ahora te vamos a explicar en qué consiste su ciclo de vida y las diferentes etapas para las conozcas.
CICLO DE VIDA DE LOS SALTAMONTES
Los saltamontes forman parte de lo que la mayoría de nosotros conocemos como insectos y tienen una alimentación que es herbívora. Pueden ser observados en otoño, primavera y verano. Sin embargo, lo más habitual es encontrarse con estos insectos durante la estación del otoño.
El ciclo de vida varía en función de la fase o etapa en la que se encuentren de su desarrollo. A continuación te explicamos lo más relevante acerca de cada una de estas etapas o fases.
ETAPA DE HUEVO
Se trata de la primera de las etapas dentro de su ciclo vital. En ella la hembra del saltamontes deposita los huevos bajo la superficie terrestre.
Normalmente, los huevos son escondidos debajo de tanto hojas como arena. Así se trata de evitar que sus depredadores naturales puedan acceder fácilmente a los huevos, entre otras cosas.
La hembra del saltamontes esconde los huevos debajo de la superficie terrestre, utilizando como medio para ello desde hojas hasta arena. En función de la especie de saltamontes, cada una de las vainas puede contener entre 10 y 160 huevos como promedio.
ETAPA DE NINFA
Existe acuerdo unánime dentro de la comunidad científica en cuanto a que es ésta, la primera de las etapas en las cuales los saltamontes jóvenes observan el medio exterior que les rodea.
Los saltamontes adultos y las ninfas guardan un extraordinario parecido, salvo que necesitan del transcurso de una serie de fases caracterizadas por la pérdida de la piel, o el crecimiento de sus alas de forma progresiva.
Lo habitual es que las ninfas jóvenes maduren durante un espacio de tiempo que oscila entre los 30 y 42 días como media.
ETAPA DE MUDA
Considerada como la tercera de las fases en el ciclo de vida de estos insectos, cuenta con una gran relevancia. El esqueleto externo cuenta con funciones de gran importancia como por ejemplo, la protección del medio exterior y frente a los ataques de sus depredadores naturales.
Durante esta etapa, se desprenden de su esqueleto externo, avanzando hacia la madurez propia de los ejemplares adultos.
Poco a poco crecen más, tienen modificaciones a nivel estructural y se aproximan a la edad adulta de los saltamontes.
ETAPA DE ADULTO
Aproximadamente a los 30 días los saltamontes tienen las alas que les acompañarán durante su vida adulta.
Una de las principales características que diferencian a los ejemplares de saltamontes adultos de otros más jóvenes es su movilidad. Mientras que las ninfas presentan unas mayores dificultades para moverse, escaparse de sus depredadores naturales o incluso alimentarse, a los adultos les resulta más sencillo.
En función de diferentes factores como por ejemplo, el clima que les rodea, los saltamontes adultos pueden vivir unos 50 días aproximadamente como promedio. Lo más frecuente es que los adultos no superen los 2 meses de vida, aunque estas cifras pueden variar según los distintos factores que te hemos explicado a lo largo de este artículo.